Martes, 5 de abril de 2016 Conciencia Diaria. Karen Berg
Durante el tiempo en el que un alma está en el vientre, esta es guiada por ángeles que le dicen por qué ha regresado a este mundo y qué clase de vida vivirá. Cuando el bebé sale del vientre, el momenten el que se ve la cabeza, todo se olvida hasta los 12 años en el caso de las niñas y hasta los 13 en el de los niños. En ese momento se despierta en el niño la capacidad de recordar la perfección de su alma y se pone a su disposición toda la información que los ángeles le dieron. El niño se convierte en adulto y en una Vasija completa que puede revelar la Luz de Dios.
La idea es que toda persona tiene el derecho y la capacidad de encontrar un camino espiritual en cualquier momento que así lo escoja. Si pasamos por dolor, entonces podemos elegir crecer a través de él. Si pasamos por situaciones incómodas, entonces podemos elevarnos a través de ellas también. Nuestra espiritualidad siempre está disponible para nosotros porque es la esencia de quienes somos.
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